Entre otras cosas, el presidente se propone "reevaluar el papel del intermediario" en la cadena de valor farmacéutica, "acelerar la aprobación de los genéricos" e identificar medicamentos con receta que puedan "reclasificarse" para su venta libre.
Se aferra a una ley destinada a proteger la seguridad nacional de EEUU y, con esa excusa, imponer nuevas tasas e impulsar la producción nacional de esos bienes.
Este problema es multifactorial, por lo que para combatirlo hay que analizar muchos aspectos, como la acumulación de grasa abdominal o la inflamación crónica.