Rosa Carpenè fue madre poco antes de alcanzar los 15 años. Con apenas 31 fue abuela y, a los 58, bisabuela. Ahora, tiene un propósito: entrar en el Libro Guinness de los Récords. "Ser bisabuela a mi edad me permite disfrutar plenamente de toda mi familia", ha asegurado, en unas declaraciones que ha difundido Il Gazzettino. 

Esta mujer, actualmente, ejerce de auxiliar escolar en la secretaría del IPIA de Conegliano. Para encontrar el comienzo de esta historia, ella misma se remonta al lugar en el que conoció su marido, quien ya tiene 67 años. Sucedió en Revine. 

"Él era artista de circo y nos enamoramos cuando llegó a mi pueblo con sus espectáculos itinerantes", ha relatado Su primogénita nació apenas unas semanas antes de que cumpliera los 15 y ella fue madre a los 16. "Por aquel entonces yo tenía 31 años y era una abuela muy joven", ha reconocido. 

Además de a Katty, que fue la primera, Rosa tuvo a Jennifer, Robby y Patrick. "Tengo seis nietos: Verónica, Alessio, Lorenzo, Linda, Alessandra (nacida el mismo día que su madre, Jennifer) y Nicolò, el menor", ha proseguido contando Carpenè.

Es precisamente el tercero, Lorenzo, el que va a ser padre dentro de poco, en julio, y va a convertir a Rosa en una de las bisabuelas más jóvenes de su país, según Il Gazzettino. Y, en referencia a esto, "no niego que me gustaría entrar en el Libro Guinness de los Récords", ha concluido Rosa. 

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