Peskov, el portavoz del Kremlin, denuncia un refuerzo militar del nuevo miembro de la Alianza y avisa de que su Ejército hará lo que considere necesario para defenderse si hay amenaza. El Ártico está en el punto de mira.
Es literalmente un "muro" de UAV de reconocimiento impulsados por IA, respaldados por una red de sensores, vigilancia satelital y plataformas móviles de contramedidas diseñadas para detectar e interrumpir posibles amenazas.
El informe anual de la Alianza, situaba al país como el que menos inversión destinaba. El pasado año, los aliados incrementaron en un 19,4% el gasto y 22 de ellos superaron el umbral del 2% del PIB.
El Instituto para el Estudio de la Guerra señala la persistente narrativa del Kremlin para justificar sus acciones contra Ucrania y potenciales enfrentamientos con Occidente.
Lockheed Martin Corporation ha propuesto su sistema de lanzamiento Mark 41, capaz de disparar el misil estándar-6 con un alcance de ataque aéreo de 370 km.
Sánchez ha anunciado un plan de más de 10.400 millones de euros en Seguridad y Defensa que será remitido a Bruselas para conseguir el aval comunitario y de la OTAN.
Rusia ha incrementado sus vuelos de reconocimiento cerca del espacio aéreo de los países de la Alianza desde que comenzó su guerra de agresión en Ucrania, pero los Typhoon han estado esta vez ojo avizor en el Báltico.