Qué es la Flotilla de la Libertad, la iniciativa activista que trata de romper el cerco de Gaza
Acabar con el bloqueo, entregar ayuda humanitaria, concienciar a la población mundial de la situación de Palestina y sacar los colores a la comunidad internacional son los objetivos de esta suma de organizaciones.

La Freedom Flotilla Coalition (FFC) informó esta madrugada de que militares israelíes habían abordado abordaron su barco, que iba rumbo a Gaza (Palestina) con ayuda humanitaria y en el que viajaba la activista sueca Greta Thunberg. Tras varios avisos y rodeos por parte de las autoridades de Israel, se perdió la comunicación con la embarcación, que fue "secuestrada".
El grupo publicó una foto en Telegram en la madrugada del lunes en la que se veía a miembros de la tripulación del Madleen -que es como se llama la nave- sentados dentro del barco, con chalecos salvavidas y las manos en alto. "Drones tipo quadcopter rodean la embarcación y la rocían con una sustancia blanca similar a pintura. Las comunicaciones están bloqueadas y se emiten sonidos perturbadores por radio", informó la Freedom Flotilla Coalition (FFC) en su canal de la aplicación de mensajería.
Más tarde, confirmó que el barco había sido "atacado en aguas internacionales". El Ejército de Israel confirmó que se había hecho con el buque y lo trasladaba al puerto de Ashdod, en el sur del país, donde iba a mostrar a sus ocupantes el vídeo de los ataques de Hamás contra su territorio del 7 de octubre de 2023. La acción de Tel Aviv ha sido ampliamente condenada por la comunidad internacional, de Gobiernos a grupos de derechos humanos.
El Ministerio de Exteriores español, por ejemplo, ha convocado al encargado de negocios de la embajada de Israel en España para "protestar" por la interceptación de la Flotilla, en la que participaba Sergio Toribio, un activista español con quien Madrid está en pleno contacto.
¿Pero qué es la Flotilla de la Libertad? ¿Qué objetivos tiene, cuál es su trayectoria y su financiación?
La Coalición de la Flotilla de la Libertad (que sería su nombre oficial en castellano) es un movimiento de "solidaridad popular" integrado por campañas e iniciativas de diferentes partes del mundo que trabajan juntas para poner fin al bloqueo ilegal israelí de Gaza. Aunque la organización de una misión con ayuda humanitaria es su gesto más vistoso, su actividad se mantiene de forma estable con conferencias, campañas o tareas de concienciación.
Como explican en su web, sus objetivos son:
- "Romper el bloqueo ilegal e inhumano que Israel mantiene desde hace más de 15 años sobre la Franja de Gaza, que no sólo ha generado una crisis humanitaria continua, sino que ha privado a los palestinos de Gaza de su derecho a la salud, la seguridad y la libertad de movimiento, entre otros derechos humanos fundamentales". Se empezó a instaurar en 2007, tras la victoria electoral de Hamás, y es hoy uno de los nudos gordianos del conflicto palestino-israelí.
- "Concientizar a la población mundial sobre el bloqueo de Gaza, las condiciones inhabitables que impone y el hecho de que este colosal sufrimiento humano no es una catástrofe natural, sino una consecuencia de decisiones políticas y militares".
- "Condenar y visibilizar la complicidad de otros gobiernos y actores globales para permitir el bloqueo. En particular, el gobierno estadounidense ha respaldado la violencia de Israel contra los palestinos durante décadas, financiando el ejército israelí con aproximadamente 4.000 millones de dólares anuales y utilizando la mayor parte de sus vetos en el Consejo de Seguridad de la ONU durante las últimas tres décadas para proteger a Israel de la condena por sus crímenes humanitarios y violaciones del derecho internacional".
"Para responder al llamado de solidaridad de los palestinos y las organizaciones palestinas en Gaza para romper el bloqueo, queremos mostrar a la población de Gaza que personas y organizaciones de todo el mundo defienden y apoyan su lucha por la dignidad y la libertad", defienden.
La Flotilla de la Libertad se creó en 2010 y "guía su trabajo de acuerdo con los objetivos y planes explícitos de la población de Gaza". "Nuestras misiones de acción directa apoyan la dignidad y la humanidad de los palestinos, trabajando con socios de la sociedad civil, en lugar de con cualquier partido, facción o gobierno. Nuestras acciones contra el bloqueo siempre se rigen por los principios de no violencia y resistencia no violenta", explicitan.
Las organizaciones miembros del FFC incluyen: Barco Canadiense a Gaza; Flotilla de la Libertad Italia; My Care Malasia; Kia Ora Gaza [Nueva Zelanda / Aotearoa]; Barco a Gaza Noruega; Alianza de Solidaridad con Palestina [Sudáfrica]; Rumbo a Gaza [España]; Barco a Gaza Suecia; IHH / Asociación de Libertad y Solidaridad Mavi Marmara [Turquía]; Barco a Gaza de EE. UU.; y el Comité Internacional para Romper el Asedio de Gaza. Nuestras organizaciones asociadas incluyen la Campaña de Solidaridad con Palestina [Gran Bretaña]; Free Gaza Australia y la Plataforma de ONG por Palestina [Francia].
La Fundación de Ayuda Humanitaria IHH, de origen turco, ha informado regularmente de que las misiones se pagan con el dinero de las campañas que se llevan a cabo en cada país, de las que tienen informes de transparencia.
Entre sus contrapartes en Gaza están la Unión de Comités de Trabajo Agrícola, que "representa a los pescadores y agricultores palestinos y promueve su perseverancia y soberanía, dentro de un marco de desarrollo comunitario, sostenible y liberador", o We are not numbers, "jóvenes periodistas palestinos aspirantes e inspiradores que cuentan las historias humanas detrás de las cifras que aparecen en las noticias sobre el bloqueo". Ambas son entidades repetidamente usadas como fuente fiable por la prensa internacional que cubre el conflicto.
Las misiones
La primera misión de la Flotilla fue en 2008, cuando 35 barcos se prepararon para romper el cerco, entonces reciente, de la franja costera palestina. Se ha ido repitiendo todos los años, pandemia aparte. Se acaban de cumplir 15 años de la más conocida de sus expediciones, no porque fuera exitosa -ya que Israel ha impedido siempre la llegada de sus botes, bien con presión que obligaba a su retorno, bien con interceptaciones de las naves-, sino porque fue dramática.
Ocurrió el 31 de mayo de 2010, en aguas internacionales del mar Mediterráneo, la Marina de Israel abordó a una flotilla de seis embarcaciones de la organización, matando a nueve activistas e hiriendo a un periodista que iba también a bordo. Fueron heridos, además, otros 30 activistas. Una de ellas, tras pasar cuatro años en coma, acabó muriendo, elevando a 10 los asesinados. En aquella ocasión, viajaban 633 personas de 37 países en el Mavi Marmara, un buque que quedó en el recuerdo de la causa propalestina.
Ya este año, el pasado mayo, la organización quiso entregar en Gaza ayuda humanitaria, pero igualmente fue detenida en mitad del Mediterráneo. En esta ocasión, por el ataque de un dron, en una agresión de la que culpan a Israel. Ocurrió a la altura de Malta, por lo que se supone que Tel Aviv no tenía autoridad para cargar contra ellos. El Gobierno de Benjamin Netanyahu no ha hecho referencia a este suceso.
Ahora la idea era repetir la expedición, con un único barco y 12 personas a bordo. Hacía siete días que el Madleen había zarpado de Sicilia (Italia) con destino a Gaza para "entregar ayuda humanitaria, romper el bloqueo israelí y visibilizar el sufrimiento continuo en el enclave palestino".
La misión con más presencia española fue la del pasado año, que contó con la exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau; el concejal de Podemos en Málaga, Nico Sguiglia; la diputada de IU en el Parlamento de Extremadura, Nerea Fernández; la coordinadora autonómica de Podemos en Andalucía, Marina Velarde; y el eurodiputado de Catalunya en Comú Jaume Asens.